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Cuidados de la piel para un verano radiante

Agosto ha llegado y con él, la emoción de los días soleados y las aventuras al aire libre. Es la época perfecta para disfrutar de la playa, la piscina y las vacaciones con amigos y familiares… Sin embargo, mientras nos entregamos al gozo estival, no podemos olvidar que la exposición al sol y las altas temperaturas pueden afectar nuestra piel de diversas maneras. Es esencial adoptar una rutina de cuidado constante.

  1. Protector solar: El Mejor Amigo del Verano.
    El sol es el símbolo del verano, brinda calidez y vitalidad, pero su radiación uvb y uva son también aliados del envejecimiento prematuro. Además del protector solar, considera llevar ropa de protección, como sombreros de ala ancha y gafas de sol con un buen filtro de protección homologado.
  2. Mantén tu Piel Hidratada: Tanto por dentro, como por fuera.
    El calor del verano puede llevar a la perdida de agua y deshidratación, por eso además de beber agua de manera constante, podemos recurrir a zumos y frutas que aporten hidratación como el melón, la sandía, las nectarinas… además las frutas aportan vitaminas que ayudan a sintetizar los rayos solares de la manera correcta y más beneficiosa para nuestra piel. Para hidratarte por fuera, utiliza productos de cuidado de la piel ricos en ingredientes hidratantes como el ácido hialurónico (que ayuda a retener la humedad) el jugo del aloe vera, o componentes como el escualeno que se trata de un aceite poco graso que ayuda a humectar la piel y evitar la pérdida de su hidratación natural.
  3. Una buena limpieza : Elimina las Impurezas
    El calor y el sudor pueden obstruir los poros, lo que aumenta las posibilidades de brotes de acné y problemas cutáneos. La limpieza adecuada de la piel es crucial durante el verano. Lava tu rostro suavemente con un limpiador adecuado para tu tipo de piel, para eliminar las células muertas y dejar lugar a una piel fresca y renovada. Sin embargo, evita las limpiezas faciales profundas y con aparatología, así como los exfoliantes o limpiadores abrasivos
    ya que la exposición al sol deja tu piel vulnerable y sensible, en esta época es mejor dejar lugar a las limpiezas suaves.
  4. ¡No te olvides de los labios!
    Solemos olvidar que los labios también se queman, se cuartean por deshidratación y se resecan por el sol. Recuerda llevar en tu bolsa de la playa un cacao o vaselina con FPS (los puedes encontrar en cualquier farmacia).
  5. Mantén tus cosméticos en óptimas condiciones: El verano y las altas temperaturas pueden dañar el estado de nuestros cosméticos y estropearlos, por eso es importante mantenerlos en un lugar fresco y seco, evitar exponerlo al sol, cerrar bien los frascos y mantenerlos abiertos lo menos posible, además de manipularlos con mucha higiene y especial cuidado. Sobre todo en el caso de la cosmética natural, en la que prescindimos de conservantes, son más susceptibles de sufrir cambios y pueden perder sus propiedades. Ten en cuenta que si vas a viajar, lo más recomendable es pasar a un frasco pequeño una parte de tu cosmético, o llevarlo en formato mini talla, para evitar que se estropee toda la totalidad del producto, además de tener especial precaución durante trayectos largos, para que vaya bien protegido de la luz y el calor.

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